Capitulo final.

{15 años después, Barcelona}

[Erik]

Alexis: Bueno, esa es la dirección yo voy para el hotel, te espero en una hora.

Erik: Bueno, está bien.

Cerré la puerta del coche, mi padre estaba volviendo a Barcelona después de 15 años.

Fui en un taxi, había estado desde pequeño en Inglaterra con mi padre, pero cuando se retiro en el Liverpool, nos fuimos para Chile, con mi abuela.

Andrea ha estado con nosotros todo el rato, incluso su hija la que he cuidado tanto y me ha dado tanta pena dejarla allí me recordaba a Barcelona todo el tiempo.

El hombre me dejo en frente del bloque de pisos, aquel del que tantas cosas me había contado mi padre.

Como conoció a mi madre, y todo.

Yo no supe de su muerte hasta que cumplí los 15 años, ya que descubrí unas libretas escritas por mi madre, y en ellas no decía nada de su viaje.

Vivir sin madre es duro, pero vivir engañado toda tu vida es peor.

Miré hacía arriba, y localice el piso con la mirada.

Entre en éste, y subí por el ascensor, ese ascensor, era importante para mí, y eso que no he vivido esos momentos.

Mi padre me contaba tan detalladamente como conoció a mi madre que me lo imagine.

Varias noches estuve dándole vueltas a todo.

Tengo 20 años, y bueno, soy feliz, pero me falta algo en la vida, y quizás con este viaje encuentre eso, lo que me falta.

Llegue al último piso, y abrí la casa de mis padres, un olor a antiguo me azoto la cara.

Pero pude rememorar todo ahí.

Mis lágrimas se escaparon sin previo aviso, sus primeras noches juntos, su primera cena.

Todo estaba ahí y parece que podía sentirlo.

Después de secarme mis lagrimas y cerrar ese capitulo de la vida de mis padres me marché para fuera.

No quise montarme más en el ascensor así que baje por las escaleras.

La verdad es que no quería irme de allí, todavía no.

A lo mejor aun podía quedarme allí a vivir, quien sabe, unos nuevos aires me vendrían bien.

Aunque no quiero dejar solo a mi padre, pero bueno tiene que saber que tengo ya unos añitos.

Y por fin llegué al final de aquella escalera, me fui para la puerta, y la abrí.

Pero no se abrió del todo, me extrañe, y sentí algo, la intente de nuevo abrir.

Y vi a una chica en la puerta.

X: Haber si vemos por donde vamos, que me has dado con la puerta.

La chica me miró a lo ojos, tapándose la nariz.

De la cual empezó a salir algo de sangre.

Yo me quede aturdido, no puede ser.

X: ¡Hey! Estas en Babia, dame un pañuelo que me mancho la ropa.

Erik: Eh sí, toma –Saque un paquete de mi bolsillo y se lo di.

X: ¿Tu quien eres?

Erik: ¿Yo?

X: No, el paquete de pañuelos no te jode.

Le miré a los ojos, me quede impactado.

Erik: Soy… soy .. el nuevo vecino.

X: ¿Sí? ¡A que piso?

Erik: Al último.

X: Ah guay.

Erik: Me llamo Erik encantado.

X: Bueno, encantado, pero mi nariz no lo está, me llamo Sofía.

Erik: Oye, una cosa, ¿Cuántos años tienes?

Sofía: ¿Para que quieres saberlo?

Erik: Es que no se, me da la impresión de que tienes 18 o así.

Sofía: Ojalá, tengo 15. 

Ahora si que se me cayo todo.

Sofía: Bueno rarito, me piro, ya nos veremos.

Yo ni me inmute.

La chica se entró, y yo me quede ahí helado.

Cuando me despeje, paré un taxi y le dije que me llevará al cementerio de Barcelona.

Busque entre las miles y miles de lapidas.

Y después de mucho buscar la encontré, me senté en frente.

Erik: Yo no suelo creer en el destino mamá, pero lo que me ha pasado hoy no tiene otra explicación. ¿De verdad esa chica está para mi? La forma de conocerla, y todo, la edad, encaja y concuerda.

¿Eres tú? No bueno tu no, pero mamá, ¿Qué pasa? Me ha sido difícil superar no tenerte, te he echado muchísimo de menos, he soñado miles de veces contigo y con volverte a ver.

No sé que hacer ya, me voy a venir a vivir a Barcelona, al piso de Papá, donde tantos momentos juntos habéis tenido.

Espero que esa chica de 15 años no sea como tu, porque ya me dijo papa como eras, una cabezona en toda regla.

Bueno no sé que decirte más solo una cosa más, que sepas que te quiero por encima de todo, que me da orgullo saber todo lo que hiciste por mi antes de morirte, por cierto Zayn ha sido una gran apoyo para mí, muchos días le veía llorar y no sabía a que se debía y ahora lo entiendo todo, están ahora todos felices, como tu quisiste, y espero que desde donde estes, tu felicidad sea inmensa, aquí estoy 15 años después, te quiero mamá.

 FIN

Gracias a todos por vuestro apoyo y por las opiniones hacía esta novela.

Capitulo 76.

-Irene-
Sentí como la puerta de la habitación se abrió de nuevo, y por ella apareció Andrea, con una media sonrisa forzada.
Pasó para el interior de la habitación un poco dubitativa, y con mi mano le señale la cama para que se sentase a mi lado.
Andrea: Yo no sé que decirte Irene, no lo se.
Irene: No tienes que decirme nada, porque no puedo con más dolor.
Andrea: Me duele perderte, pero más me duele que Erik pierda a su madre.
Irene: No, exactamente.
Andrea: ¿Cómo que no…?
Irene: Te quería pedir un inmenso favor. –Dije casi suplicando.
Andrea: Dime.
Irene: Alexis es una persona que viviendo sola se come mucho la cabeza, entonces sé que tu estos años has estado siempre con nosotros, y sé que si le das cariño, podría llegar a quererte, y así poder olvidarse de mí y volver a ser ese chico con sonrisa imborrable.
Andrea: ¿Qué dices Irene?
Irene: Andrea te lo pido por favor, que a mi me da igual morirme, pero no quiero que le pase nada a ellos, que son mi vida Andrea, por favor. –Mis lágrimas salían de mis ojos, ardían.
Andrea: Irene, él nunca se fijará en mí, y menos olvidarte, es imposible.
Irene: Inténtalo, con el tiempo aprenderá a vivir sin mí.
Andrea: Esto es surrealista.
Irene: Lo sé, todo me pasa a mí, pero hazme feliz mis últimas horas.
Andrea: Irene, no se si podré.
Irene: Si lo harás y también serás muy feliz a su lado cariño.
Me levante y le abrace, le di muchos besos.
No la quería soltar, era duro irse de este mundo dejándose todo aun por hacer y teniendo a tu familia ya, pero más duro era saber que le iba a arruinar la vida a las personas que hacían que mi vida tuviera sentido.
Andrea: Irene, ¿Sabes si te queda mucho?
Irene: Creo que, poco, un día como mucho, siento que me arde todo.
Andrea: Yo te prometo que no los dejaré nunca solos, pero prométeme tu, que serás feliz el día que te queda.
Irene: Lo estaré, sonreiré por todo lo bien que me lo ha pasado toda mi vida.
Andrea: Te quiero Irene, no lo olvides.
Sus lágrimas salían, caían en mi cuello, mi corazón se rompía de dolor y quería morirme ya, librarme de este sufrimiento.
Vivir así tenía que estar prohibido.
Andrea: Decirte que me alegro muchísimo de haberte conocido, de saber que las personas buenas existen y que sepas que tienes una familia que cualquiera quisiera tener y que haré todo lo posible para que tus dos hombrecitos sean lo más felices posible, ¿Vale?
Irene: Siempre estaré a vuestro lado.
Andrea: Espero que sea verdad.
De nuevo me fundí en un abrazo con ella.
También me lo guarde en el fondo de mi débil corazón.
Sonreí porque sé que me querían, y lloré porque sabía que llorarían por mi ausencia.
Andrea: Irene, lo siento me tengo que ir, porque Erik esta en la guardería, yo eso,  que ojala se te pase todo en nada y no sufras no te lo mereces. Te quiero mucho, y espero que nos protejas desde donde estés.

Ví como salió de la habitación y entro Alexis.

-Alexis-
Escuché todo lo que Irene le dijo a Andrea, ¿Cómo puede hacer eso? ¿Tanto me quiere?
Es capaz de hacer que le odie para que sea feliz, no puede ser cierto.
La verdad era que si ella quería eso, yo haría todo lo posible por complacerla era lo único que podía hacer.
Me senté a su lado, sabía que se iba acercando el día en el que se me iría gran parte de mi vida.
Así que me senté a su lado, la abrace y la bese como nunca antes lo había hecho, mi vida s basaba en ella, me arrepiento muchísimo de haber hecho tantas estupideces pero si aun así ella ha estado junto a mí era porque estábamos destinados a conocernos.
Irene: Alexis, que yo no sé que hacer ni que decirte, que eres mi vida, toda entera, mi razón de ser, mi sonrisa lo eres todo, por favor prométeme que serás feliz cuando yo falte.
Alexis: ¿Sabes lo que es perderte? Irene, gracias por todos estos años, por todas las sonrisas, por todo, gracias por hacerme feliz, gracias por cambiarme y por darme lo único que me faltaba.
Irene: Esto días me han hecho recordar todo lo que he vivido contigo, todo, desde que me curaste hasta que ahora lloras por mi, no por vivir menos te voy a querer menos, no, mira que si mi corazón  sigue latiendo es porque sabe que no quiere perderte, se niega a que todo se acabe así, no quería un cuento de hadas, pero tampoco quería un drama.
Alexis: No me digas eso –Dijo llorando.
Irene: Espero haber cumplido mi deuda, 1000 besos, nadie me puede hacer olvidarte, y menos dejar de pensar en ti, quiero que Erik sea feliz al igual que tu, no te merece una vida triste por mi, porque entonces no cumplirás mi ultima promesa.
Alexis: No me dejes Irene, no sirvo para vivir sin ti, por favor, que eres todo lo que tengo, tus suspiros es la melodía de mi vida, no me hagas esto, no hagas que viva sin ti.
Irene: Me muero, no puedo hacer nada, y tu tampoco hay que aceptarlo.
Alexis ¡NO! –Dijo gritando y pegando puñetazos a la pared.
Irene: Abrázame por favor, hazlo.
Me apretó contra él, me estaba debilitando, mis ojos se cerraban sin que yo quisiera.
Irene: Aunque me muera mi corazón te seguirá amando, como en la película del titanic.
Alexis: Desde el primer momento en el que te vi sabia que serías mía, sabia que serias mi mujer, sabia que serias la madre de mis hijos, pero no sabía que te perdería tan pronto.
Irene: Sonríe por todo, y llora por las sonrisas perdidas.
Le agarré suavemente de la cara, puse mis labios en los suyos.
Y de nuevo necesitaba sentir sus labios, le necesitaba.
Irene: ¿Me puedes traer un batido de chocolate? Es que dicen que eso no se lo suelen dar a los pacientes.
Alexis: Si ya voy.
Irene: Espera, el abrazo.
Se acercó a mi, y me abrazo, más que a mi, abrazó a mi corazón. Lo sentí como nunca.
Alexis: Ahora vengo, te quiero.
Irene: Y yo a ti te amo por y para siempre.
Se marchó de la  habitación.
Empecé a sentirme mal, mi corazón latía despacio, mi respiración era agitada, no podía respirar.
La maquina que controlaba mis latidos, empezó a pitar cada vez más rápido, mi ganas de vivir iban desapareciendo, y al final después de todos estos años, por primera vez sabía lo que era desaparecer de la vida de todos, mi corazón, ese que tanto ha sentido, se estaba parando y junto a él, todas mis funciones vitales fueron apagándose, descansando por fin de tanto sufrimiento, y a la vez tantos recuerdos, adiós a todos, mi vida ha tenido sentido gracias a vosotros.

-Alexis-
La puta maquina se  tragaba el dinero, bueno en fin, tampoco por un euro.
Me fui para la habitación de Irene, vi a una enfermera entrar en ella.
Y me alteré mis pulsaciones iban a velocidades inhumanas.
Entre en la habitación y la vi en la cama sin vida, mi corazón se salió de mi boca
Y sentí que mis piernas se estaban debilitando solté el batido y entre corriendo hacia donde ella, mis lagrimas salían sin control, estaba destrozado,  creía que no iba a pasar tenia  esperanza en que sobreviviría, pero no, al final ocurrió lo que tenia que ocurrir.
Alexis: ¡IRENE! Escúchame despierta
Dije mientras le agarraba del cuello.
Sus ojos marrones había desaparecido, estaba un poco fría, más bien templada, estaba completamente floja, le abrace por ultima vez, lloré como nunca lo había hecho, quería morirme, quería gritar quería pegarle a todos, no podía ser cierto.
Alexis: ¡IRENE! –Dije berreando.
Alexis: No me dejes sin ti.
Un chico me agarro suavemente y me abrazó, Zayn estaba llorando, sus ojos marrones estaban apagados, se nos había ido algo que jamás creímos saber si podríamos vivir sin ella.
Zayn: Alexis, vamos a fuera…
Alexis: ¡NO!
Zayn: Ella te ha dicho seguro que no te quería ver así.
Me giré para ver a Zayn, estaba llorando desconsolado.
Alexis: Zayn, se me ha ido para siempre… -Dije llorando
Zayn: Lo se, y a mi, Alexis, y a mi.
Definitivamente, sabía que mi amor hacía ella sería infinitamente eterno.

{Irene: ¿Que te pasa?

Alexis: Nada pensando que haria si me muriera...

Irene: Yo..., la verdad es que intentaria salvarte.

Alexis: Estare muerto.

Irene: Pues contigo hasta el mas allá. Y a mi la muerte no me va a separar de ti, que lo sepas, siempre a tu lado estaré. Recuerda siempre eso.

Alexis: Lo recordare. }

Capitulo 75.

-Irene-

Llevaba ya un par de horas despierta, esperando a que Erik viniera, hoy estaba mal, así que sabía de sobra que mis días estaban contados, y no me iría tranquila si no me despedía de él.
De nuevo de mis ojos caían lagrimas de tristeza.
Se me va la vida en un suspiro, se me va.
De pronto escuche las risas de mi hijo, y me sequé las lagrimas rápidamente y sonreí lo mejor que pude.
Se abrió la puerta y apareció junto a Alexis.
Mi vida resumida en dos nombres.
Erik: ¡MAMA!
Sonreí de nuevo, y le agarré para subirlo a la cama.
Irene: Hola amor, ¿Qué tal estás?
Erik: Bien mamá, pero te echo de menos en casa.
Irene: De eso te quería hablar cariño.
Erik: Dime. –Dijo mostrando su mejor sonrisa.
Irene: Cariño, me voy de casa.
Erik: ¿Dónde nos vamos? –Dijo sorprendido.
Irene: No, no, me voy yo, tú te quedas con Andrea y papá.
Erik: ¿Y porque te vas?
Alexis se giró, sabía porque era y me estaba dando ganas de hacer algo, de venderle mi alma al diablo si hace falta.
Erik: ¿Mamá?
Irene: Cariño, tengo un trabajo mejor que aquí, y me voy a ir.
Erik: ¿Volverás?
Irene: Siempre estaré a tu lado cariño. –Dije abrazándolo.
Erik: ¿Pero vas a venir, para mi cumple o para el de Papa?
Irene: Cielo, no lo se, a lo mejor si, todo depende de mis días libres.
Vi como se abrió la puerta del servicio y de ella salió Alexis.
Erik: ¿Cuándo te vas?
Irene: No lo se, puede que hoy, mañana, a saber.
Erik: Bueno toma, te doy esta pulsera para que te acuerdes siempre de mí, ¿Vale?
Irene: Nunca me voy a olvidar de ti, ¿lo sabes, no?
Erik: Lo se mama, te quier mucho.
Se hundio en mi, y yo le rodee con mis brazos, mientras que de mis ojos salían millones de lagrimas.
Alexis se acerco y se unió al abrazo.
Alexis: Dile a mamá que es lo mejor que me ha pasado en la vida.
Erik: ¡Eso lo sabe ella!
Irene: Pues sí, Alexis lo sé.
Erik: No me voy a olvidar de ti, espero que tu de mi tampoco mamá.
Irene: Nunca cariño, nunca.
De nuevo le pegué hacía mi, y le bese en la nuca.
Respiré su olor, y me lo guarde en el fondo de mi corazón.
Alexis: Erik, cariño, vamonos para casa, que tienes que dormir.
Erik: Vale, bueno mamá, espero verte pronto, ¡TE QUIERO! –Dijo sonriendo y despidiéndose con sus manitas.
Irene: Erik…
Erik: Dime –Dijo expectante.
Irene: Cuida de papa, y no te cargues jarrones, hazlo por mi.
Erik: Vale mamá.
Me agarró de la mano, me costó la misma vida dejarlo ir.
Sabía que sería la última vez que le vería, que le sentiría a mi lado.
Ahora sí que me estaba muriendo de verdad, no sabéis lo que es esto.
Hundí mi cabeza en la almohada y respiré.
Pero de pronto se abrió la puerta de nuevo, era Alexis.
Se sentó en la cama a mi lado y me agarró fuerte de la mano.
Alexis: ¿Por qué nos tiene que pasar esto a nosotros? ¿Por qué? –Dijo casi gritando.
Irene: Oye que me voy yo no él, no seas tonto y sonríe.
Alexis: Irene, no me vengas con esas, sabes de sobra que eres mi vida.
Irene: Y tu la mía, pero las cosas pasan por algo.
Alexis: ¡NO ES JUSTO! Hemos pasado por tanto, yo quería una vida normal casado hijos, eso.
Irene: Y yo, pero ¿Sabes que?
Alexis: ¿Qué?
Irene: Quiero que seas feliz, y le des la mejor educación a Erik.
Alexis: No Irene, no te vayas todavía.
Irene: Tranquilo todavía no.
Alexis: No puede ser, no me lo creo.
Irene: Decían que el amor a primera vista no existía.-Solté una sonora carcajada.
Alexis: Te amo Irene, no cambiaría ni un momento contigo por nada.
Irene: Ni yo Alexis, ni yo.
Mis ojos se cerraron lentamente, su mano apretaba la mía.
Y sentía como me llamaba pero yo sólo podía ver cada momento que pase con él.
Como mi vida cambio por un viaje en ascensor.

Capitulo 74

[Irene]
Después de aquel gran fin de semana, ingrese en el hospital, le dije a Erik que tenía unos mareos, no quería preocuparle.
No puedo quejarme de vida, para nada, tengo que dar gracias por tantas cosas buenas que me han pasado. Asi que ahora quiero hacer feliz a mi marido, si eso mi marido, ya no es novio, es marido. Ahora es cuando uno se da cuenta de lo que significa eso.
Lleva Erik aquí tumbado en la camilla conmigo desde que llegué, Alexis estaba sentado en el sofá con los ojos rojos, odio que este asi.
Me da pena verle así, es mi vida y si el falta, yo no puedo seguir hacía delante.
Erik: Mamá tengo hambre…
Me levante de la cama, pero una enfermera me vio y me llamo la atención.
Irene: Voy a ir por algo para mi niño…
Enfermera: Ven, que te compro yo algo.
La chica se lo llevo, y yo miré a Alexis.
Alexis: Aun sigo esperando a alguien que me diga, “Te lo has creído inocente, era una broma”, pero conforme que van pasando las horas mis ilusiones se van desvaneciendo.
Irene: No pienses en eso, venga.
Alexis: ¿Cómo que no? Irene, que te vas a morir, no me jodas.
Irene: Lo se, pero a mi me haces daño, viéndote así.
Alexis: Y a mi viendo a ti.
Irene: Mi madre casi le da algo cuando se lo he dicho.
Alexis: No es para menos.
Irene: Lo siento, pero no puedo tomármelo de otra manera.
Alexis: No así Irene…
Irene: Sí Alexis, tienes que ponerte en mi lugar, me voy a morir, tanto si quieres como si no, como si te gastas dinero como si no, eso tenlo claro.
Vi como empezó a respirar fuerte, su mirada se perdió y cayo al suelo.
Yo empecé a gritar desconsolada.
Me tiré al suelo junto a él.
Irene: ¡Cariño! –Le gritaba
Le daba guantadas, pero nada, no respondía un médico entro, y le metieron una pastilla.
Yo empecé a llorar desconsolada, no podía verle así, no a él.
Lo tumbaron en la cama de mi habitación y salieron las enfermeras.
El médico me miró.
Doctor: Irene, escúchame, sé que tu enfermedad no tiene cura, pero no te lo tomes así.
Irene: ¿Así como?
Doctor: Alexis ha tenido un ataque de nervios, al menos para cuando estés con el no seas así.
Irene: Está bien, pero no entiendo.
Doctor: No es fácil ver como se desvanece lo mejor de tu vida, créeme.
Irene: Vale, intentaré suavizarlo un poco…
Doctor: Nunca he visto a nadie como tu, tan tranquilo sabiendo lo que espera.
Irene: Ni yo misma se como estoy aquí.
Doctor: Bueno me tengo que ir, pero recuerde eso, tranquilidad.
Irene: ¿Puedo hablar con él?
Doctor: Sí.
Irene: Gracias por todo en serio.
Me aleje de la puerta y me acerqué a él.
Estaba con los ojos cerrados.
Irene: Cariño, ¿Estas despierto?
Eso hizo que sus preciosos ojos marrones se abrieran, y yo me perdiera una vez más en ellos.
Le acaricie el pelo, con suavidad.
Alexis: ¿Qué me ha pasado?
Irene: Un ataque de nervios, tranquilo estas bien.
Alexis: No sé que me pasa.
Irene: Que estas superando tus fuerzas, simplemente es eso.
Alexis: Pues si, no se como estoy de pie.
Irene: Por nosotros, por Erik, por todos.
Alexis: Sí, lo se, pero tu te has rendido muy pronto.
Irene: Esto por desgracia es imposible ganar, al menos así.
Alexis: Dime que me quieres por favor, quiero oírte.
Irene: Te quiero, y mucho.
Alexis: Otra vez, una más.
Irene: Te quiero.
Apoye mi cara en su pecho y cerré los ojos con dolor, no es justo, no lo es.
Irene: ¿Te he dicho alguna vez que eres lo más bonito de todo el mundo?
Alexis: Sí, pero jamás me lo creí.
Irene: Ya es hora.
Alexis: Lo que es tarde.
Irene: No digas eso.
Alexis: Cualquier día no abrirás más los ojos, y seré yo el que no los pueda cerrar sin poder pensar en ti, ¿Entiendes?
Irene: No importa, venga, descansa, voy a por Erik, y llamo a Andrea para que se lo lleve.
Deje a Alexis dormir en la cama, y me fui en busca de Erik, estaba feliz hablando con la enfermera, que risas se traían.
Llamé a Andrea para que viniera a recoger al pequeño y llevárselo a casa a comer.
Cuando le contamos a Andrea la noticia se quedó en estado de schok se creía que era de broma todo aquello, pero por desgracia no lo era, y cada día podría ser el último para mi,

Capitulo 73.

Estaba esperando al médico, hoy me daban los resultados de las pruebas que me hice el otro día, lo cierto es que me empezó a doler muchísimo la zona de la pelvis desde hacía ya un año o así, pero con unos antibióticos se me pasaban, no le di más vueltas, pero desde hace meses sangraba, y no era por la regla.

Y ya hace unas semanas decidí volver al medico, a que me hiciera algunas pruebas.

De pronto apareció el médico con rostro serio, muy serio.

Carlos: Irene, ¿Desde cuando no te haces pruebas?

Irene: Pues 3 o 4 años.

Carlos: Siento decirte que tienes un cáncer vaginal…

Abrí los ojos como platos, mi corazón se iba a salir.

Carlos: Lo tienes muy extendido, así que siento decirte, que tendremos que hacerte más pruebas para ver si, ha sucedido la metástasis.

Irene: Pero…

Carlos: Si hubieras venido hace tiempo, esto se hubiera podido contrarrestar.

Irene: ¿Me estás diciendo que…?

Carlos: Probablemente no tenga solución…

Irene: Me voy a morir…

Mis lágrimas salieron descontroladas.

Carlos: Yo, no sé que decirte, en estos momentos lo mejor será que te ingresemos y empezos a hacerte todas las pruebas para saber si esto tiene solución.

Irene: No, yo me voy a mi casa, con mi familia, si me voy a morir, quiero que al menos mi hijo haya estado todo el tiempo posible con su madre.

Carlos: Pero Irene, créeme que no es lo mejor.

Irene: Gracias por todo, ya le llamaré.

Me limpie las lagrimas y me fui para casa, tenía que decírselo a Alexis.

Allí sólo estaba él, era pronto para que Erik estuviese.

Alexis: ¡Hola cariño! –Se acercó a mi y me beso.

Irene: Alexis, tengo que hablar contigo…

Alexis: ¿Qué pasa?

Mi cara, era un poema, creo que mis ojos se cerraron y mis lagrimas no dejaban abrirlos.

Alexis: Cariño, no me asustes.

Irene: Alexis, tengo…

Alexis: ¿Qué tienes?

Irene: Cáncer.

Me miró incrédulo, se sento en el sofá y cerró los ojos.

Irene: Yo…

Alexis: ¡NO!

Irene: Lo siento, me lo han dicho hoy.

Alexis: ¿Por qué no m has dicho nada de haber ido?

Irene: Alexis, es un cáncer y está extendido, yo no sabía nada.

Alexis: ¿Cuándo empiezas el tratamiento?

Irene: Pues, no lo empiezo.

Alexis: ¿Cómo que no?

Irene: Que no Alexis, que no pienso pasar mis últimos días encerrada en un hospital.

Alexis: Irene que si no tienes tratamiento te puedes morir.

Irene: ¡QUE NO! He dicho cojones, llevo ya muchos años con la mierda esta y ahora no se a ir.

Alexis: ¿Qué te ha dicho el medico?

Irene: Lo que te he dicho a ti.

Alexis: Irene, por favor, vamos al hospital y que te ingresen.

Irene: Mira, no te lo vuelvo a repetir.

Alexis: Pero Irene, ¿Me vas a dejar solo con Erik, lo sabes no?

Irene: La solución sería retroceder y haber ido hace 3 o 4 años a hacerme pruebas, ya no se puede hacer nada, no me quiero morir, pero eso no va a servir para nada.

Alexis: Irene por favor.

Irene: Lo siento, me he pasado por una agencia de viajes, tengo reservas para Disneyland, nos vamos pasado mañana con Erik, quiero disfrutar de mi hijo todo lo posible, y de ti también.

Vi como sus lágrimas salían.

Le abrace muy fuerte.

Alexis: No puede ser, dime que es una broma por favor.

Irene: Venga cariño, que yo no quiero sufrir, tienes que entenderme.

Alexis: Vamos al medico, que me lo explique a mi.

Irene: Alexis…

Alexis: Si de verdad no hay solución, toma la decisión que quieras, peor si solo hay una posibilidad entre cuatro millones lucharemos hasta el final.

Irene: Que cabezón eres…

De nuevo volvimos a la consulta del Doctor, le estuvo explicando todo acerca de la enfermedad, cuales serían las causas y las soluciones.

Pero sinceramente él nos dijo que hoy en día si se coge a tiempo hay posibilidades de salir, pero después de muchos años, es casi imposible.

Así que me salí con la mía, tomaría mis últimas vacaciones, amargas palabras para una persona que apenas llega a los 30 años de edad.

Quizás por cosas así, uno dice que siempre hay que aprovechar día a día, y decirle  todas las personas que te rodean que las quieres, por si algún día cuando te levantes, ya no están.

O quizás tú no volverás, no se que habrá después de la muerte, pero ahora no me preocupa lo más mínimo, quiero divertirme el fin de semana en Disneyland y cuando llegué el momento, estaré preparada para lo que me venga, y así es como yo me tomo todo esto.

Lo peor sin duda, no ver crecer a mi hijo, y lo que es más doloroso aun, perderlo todo sin haber podido disfrutar de todo lo que amo.

Capitulo 72.

-Alexis-
Me levante sobre las diez, hoy teníamos el día libre así que iríamos algún lado con Erik. Irene se giró en la cama y me agarró de la  mano.
Yo sonreí porque podría estar un rato con ella, sin gritos de Erik porque Andrea le quitaba el balón.
Me acerqué a ella y le bese en los labios, lo justo para que se despertará.
Esperaba un “Buenos cariño, cosa bonita” y me dijo.
Irene: ¿Estás tonto? Tengo sueño. –Se dio la vuelta.
Alexis: Hemos perdido la magia –Dije en bajito.
De repente sentí como se dio la vuelta bruscamente y me miró.
Irene: No digas eso eh, pero estoy cansada –Dijo en bajito.
Vi como se levanto de la cama y salió de nuestra habitación y a los varios segundos apareció de nuevo.
Alexis: ¿Dónde has ido? –Dije bostezando.
Irene: Erik duerme –Dijo sonriente.
Alexis: Ese niño es una marmota, yo me despertaba a las 8 siempre, a ver los dibujos…
Irene: ¿Ah pero que había dibujos cuando tu eras pequeño? –Dijo riéndose.
Alexis: Erik aún es joven para entender porque su madre  y yo nos vamos a separar –Dije moviendo la cabeza a los lados.
De nuevo se tumbo en la cama, me giré a verla.
Irene: Bésame.
Alexis: Siempre de guasa.
Irene: Pues lo hago yo.
Se incorporo y me agarró la cara.
Cerré los ojos a la espera del beso, del que llego segundos después.
Irremediablemente le abracé, es un acto reflejo.
Alexis: Te quiero mucho.
Irene: Y yo a ti cariño, y yo a ti. –Dijo casi sin que se escuchará.
Le sonreí, y me aferre más aun a ella, hacía tiempo ya que no teníamos tiempo para los dos.
Pero de pronto sonó el timbre, viendo las horas que eran y el día sabíamos que era el cartero.
Así que me levante deprisa para evitar que tocara una vez más, ya que eso supondría una personita más despierta.

Alexis: ¡Gracias!
Cartero: Fírmame aquí, hay una certificada.
Alexis: Claro. –lo hice.
Me despedí del chico y me marche para la habitación no si antes pasar por la habitación del pequeño de la casa, para comprobar que estaba durmiendo.
Y así fue, descansando estaba aun.

Alexis: Una es una invitación.
Irene: Tráela…

-Irene-

Irene: ¡SE CASAN CESC Y  NURIA! –Empece a saltar.
Alexis: Pero si no me ha dicho nada.
Irene: Pone que pronto tendrá su primer hijo.
Alexis: ¿También?
Irene: ¡Que bien!
Alexis: Lo han tenido en secreto eh, que cabrones.
Irene: Que bien, deja que la vea.

De pronto empezó a sonar el móvil de Alexis.

Alexis: ¿Sí?
Alexis: Hola, no lo se, te paso con ella.
Alexis: Toma.

Irene: ¿Quién es?
Tello: Hola Irene, nada que hoy iba a ir al Zoo, y digo, me llevo a Erik.
Irene: ¿A mi Erik?
Tello: Sí…
Irene: No, ni de coña.
Alexis: Le mordió un perro.
Irene: ¿A que clase de persona le muerde un perro?
Tello: Joder que no le voy a matar, venga anda y así estáis solitos un noche, que se quede a dormir aquí.
Irene: No se yo…
Alexis: Bueno si nos lo cuidas si.
Tello: Mucho, le voy a dar mucho amor.
Irene: ¿¡Que clase de amor!?
Tello: No seas mal pensada, por favor.
Alexis: ¿Cuándo vienes a por él?
Tello: Ya voy a por él.
No me dio tiempo a discutirle cuando colgó.
Alexis: Vamos a por el niño más bonito de todo Barcelona.
Irene: ¿Afellay?
Alexis: Siento a veces ganas de matar a ese chico…
Irene: ¡EL DIIVORCIO!
Alexis: Uy lo que ha dicho...
Vi como salió de nuestra habitación y supuse que se dirigía a la suya.
Yo me quede durmiendo de nuevo.

-Alexis-

Erik: ¿Al zoo?
Alexis: Sí, te lo vas a pasar muy bien.
Erik: ¿Y mamá?
Alexis: Creo que está durmiendo…
Erik: ¿Entonces?
Alexis: Te vas con…
De pronto sonó el timbre.
Fue abrir él.
Tello: Hola bonito, ¿Preparado para el zoo?
Erik: ¡NO! Papa no, por favor, con él no.
Tello: Siento dolor por esas palabras…
Alexis: Venga Erik, que es buen muchacho.
Erik: No me fio…
Tello: Venga veras que bien nos lo pasamos.
Alexis: Dale una oportunidad anda…
Erik: Vale, pero quiero hamburguesas para comer.
Tello: Perfecto.
Erik: Adiós papa te quiero, y a mamá también.
Tello: A mi también me quieres…
Erik: Es muy pronto, ¿De que equipo eres tú? Yo soy del Barça, como seas del Madrid, no me voy eh.
Alexis: Él trabaja conmigo en el Barça cariño.
Erik: Ah vale, pues no me suenas.
Tello: No juego mucho…
Erik: Pobre…
Tello: Hasta luego, morenito, me llevo a tu descendencia…
Erik: ¿Qué me ha llamado?
Alexis: Adiós a los dos.

Salieron los dos por la puerta y yo respiré aliviado, después de eso me marché para la habitación Irene estaba durmiendo.
Me eché encima de ella y la desperté con pequeños besos.
Alexis: Levanta dormilona, que hoy tenemos todo el día para estar juntos…
Irene: Estoy cansada, y me duele todo el cuerpo.
Alexis: Ya te curaré yo tranquila.
Y de nuevo me centre en sus labios.

Capitulo 71.

Irene.

En mi vida tan sólo ha habido dos momentos en los que me haya alegrado de haber nacido.

El día que conocí a Alexis, y cuando Erik me dijo por primera vez mamá.

Creéis que todo ha ido muy rápido, es cierto, en menos de 3 años tengo una familia.

Ha sido todo una autentica locura, pero todos los días me levanto con una sonrisa al saber que al llegar a casa me esperan 2 personas que me quieren.

Erik cada día que pasa se parece más a su padre, Andrea está harta de comprar jarrones.

Y Alexis…

No puedo explicar lo que siento por él, es imposible. Sólo se que sin él ahora mismo no sería lo que soy.

Me hace sonreír cuando estoy triste, tengo tantas sensaciones y sentimientos cuando estoy con él.

No lo cambiaría por nada en la vida, pero no es fácil vivir sabiendo que siendo mi todo, si algún día se va me quedaré sin nada…

Pensaréis que soy tonta al pensar en eso, pues más que tonta, gilipollas, pero en la vida lo mismo que estás arriba, estas abajo, no voy a estar siempre bien lo sé, lo noto y lo siento.

Pero lo cierto es que desde que di el “Sí, quiero” no me ha ocurrido nada malo, y espero que siga así.

Andrea: ¿Estás nervioso Erik? –Dijo cogiéndolo en brazos.

Erik: Un poco…

Irene: Tu tranquilo, se te pasará muy bien.

Erik: ¿Por qué no te vienes conmigo?

Irene: Porque tengo que ir a trabajar.

Erik: ¿Y papá?

De pronto salió Alexis ya vestido.

Alexis: Tengo que ir a entrenar, pero te voy a recoger así que tranquilo.

Erik: ¡Biiiiiiiiien!

Irene: Me ha dicho que te iba a traer algo…

Erik: ¿Me puedo ir contigo?

Irene: No puedes, así que venga, termínate la leche, que nos vamos.

Andrea: Ya se la ha bebido.

EriK: ¿Me quedo como recompensa no?

Irene: Que listo eres eh, a quiene habras salido.

Alexis: Somos iguales, chocala.

Erik: Si me dejas que quede.

Andrea: Chantaje al padre, pronto empiezan eh.

Irene: Venga vámonos, Alexis, recuerda que a las 3 tienes que ir a por él ¿Vale?

Alexis: Claro que si, tranquila, no se me va a olvidar.

Irene: Bueno pues me voy, os quiero –Me acerque a Erik y le di un beso, aparte del abrazo tan grande.

Alexis: Yo quiero –Dijo con pucheros.

Irene: Para ti no, por ponerte esos pelos.

Andrea: Parece que ha metido los dedos en el enchufe.

Alexis: Andrea recuerda que te pagamos os dos eh.

Erik: A mi Andrea no la eches…

Alexis: Es broma cariño.

Me acerque a Alexis y le bese.

-Alexis-

Termine de dejar a Erik en la guardería, la profesora era bastante amable, asi que confiaba en el trato que le iban a dar, cuando llegue a la ciudad deportiva, comprobé como Cristian se acercó a mí.

Tello: ¡MI COCHE!

Alexis: ¿Qué le ocurre?

Tello: Me he estrellado en la puerta…

Alexis: ¿Qué te que..?

Tello: Sí, porque paso un perrito, y me daba pena atropellarlo.

Alexis: ¿Pero tio y tu coche?

Tello: Bah eso es lo de menos, lo importante es el perro.

Alexis: ¿Y el perro?

Tello: Me ha mordido y se ha ido corriendo –Dijo poniendo cara de tristeza

De pronto se acercó Piqué.

Piqué: JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA TE HA MORDIDO, ENCIMA.

Alexis: No te pases, pobre…

Tello: Hay que no me quiere nadie, ¿Qué he hecho yo para merecerme esto?

Piqué: Va será ese pelo, que pareces un puercospin.

Tello: Teniendo amigos como tu, para que quiero enemigos, gracias por tu apoyo.

Piqué: De nada guau. –Le guiñó el ojo y se fue corriendo, mientras se reía claro esta.

Tello se marchó para el vestuario, y yo con él, teníamos doble sesión de entrenamiento hoy, asi que no podíamos pararnos a hablar.

Cuando terminamos el entrenamiento nos fuimos a las duchas, yo apenas tarde unos 20 minutos en arreglarme, porque ya egaba a tarde a recoger e Erik, Irene me iba a matar.

Me parece que quería más a nuestro que a mí.

Y lo que compresnible ya que ah salido de ella, pero yo soy su Alexis, llegué antes.

Que gilipolleces pienso en serio.

Me quito os pensamientos de la cabeza Tello, que se me acerco muy trsite.

Tello: ¿Me podríasm llevar amia casa?

Alexis: Tengo que ir a recoger a mi hijo a la guardería y como no vaya, Irene me cuega de un árbol y sin exagerar eh.

Tello: Joder si que le ha dado fuerte por el niño, ni que fuera su…. Si si, es suyo, es que no me hago a la idea, parecía ayer cuando estabais “saliendo”.

Alexis: Pues ya ves, mi niño es precioso, igual que su apdre, ha heredado mis genes.

Tello: ¿No decías que era precioso?

Alexis: Cabrón ahora te vas a patitas…

Tello: No, no, se ha aprecido a tu familia obviamente…

Alexis: Que convenio, menos mal que a mi llamas guapo y soy todo tuyo.

Tello: No, no nos equivoquemos, yo no quiero nada contigo, solo que me lleves a mi casa, vivo muy bien siendo heterosexual…

Alexis: Serás gilipollas, yo no soy gay.

Tello: Pues piqué no dice lo mismo…

Alexis: Bah ese s gilipollas.

Tello: Bueno tengo hambre, ¿Me llevas o no?

Alexis: Si per antes tengo que ir a recoger a mi hijo, como antes te he dicho, por si no lo recuerdas…

Tello: Oh si claro, tu hija… huy tu hijo…

Alexis: Todavía te vas a andando.

Tardamos unos 20 minutos en llegar a la guardería, pero claramente no había aparcamiento asi que Tello se tuvo que bajar antes queyo apra recoger a Erik, ya que estaban cerrando la guardería.

-Tello-

Entre en esa clase, tan llena de niños barra niñas, coloreando paredes, barra, mesas, barra, todo lo que pillaban…

Pobres mujeres la que lo tuvieran que limpiar, le acompaño en el sentimiento…

¿Y ahora cual es el hijo de Alexis?

Piensa, bajo, moreno, y raro… ¿Me debería de quedar pocos no?

No, son todos iguales, maldita sea.

Paso un niño y le pregunte.

Tello: ¿Conoces a Erik?

X: ¿Y tu a papa Noel?

Tello: Eso no existe…

X: ¿Cómo que no exite? ¿Y quien los trae entonces=?

Tello: Homer Simpson.

X: ¡NO!

Y se fue corriendo, le había destrozado la infacia a un niño de 3 años.

Volvi a parar a otro demonio enano.

X: ¿Qué quiere tu?

Tello: ¿Eres Erik?

X: Soy María….

Tello: Uh perdón…

María: ¿Llevo vestido rosa no lo ves?

Tello: ¿SI? No me había fijado, muy bonito el vestido de Dora la exploradora.

María: No es Dora, es Hello Kitty.

Tello: Ah, perdón de nuevo, yo es que los dibujos no los veo.

María: Peor para ti.

a niña se fue con aires de superioridad, dándome en la naríz con sus manitas tans chiquitas, pero a la ves, dolorosas…

Malditos niños…

Y de pronto se acercó una chica alta…

X: ¿Qué buscas? Estoy no es el Toy s´rous…

Tello: Un niño, bajito, moreno y raro… ¿?

X: ¿Me estás vacilando¿

Tello: No, por dios… pero… ¿LO HAS VISTO?

X: Aquí hay muchos niños así…

Tello: ¿Te sirve si te digo su nombre?

X: Obviamente si.

Tello: Creo que se llama, Raúl.

X: Ah si claro, Raúl, aquí esta.

La chica se marcho un instante y apareció con un niño, bajito, blanco de piel, ojos azules intensos y rubio.

X: Toma Raúl, han venido a por ti.

Tello: Muy guapo para ser de Alexis, este no es, ¡AH SE LLAMA ERIK!

X: ¿No sabes como se llama el niño?

Tello: Un lapsus no lo tomes en cuenta…

X: Vale…

Tello: ¿Erik?

X: Es este…

Y por fín era el hijo de Alexis.

X: Mira Erik ya han venido a por ti..

Erik: No…

Tello: ¡Hola! –Puse voz rara, muy rara.

Erik: Hablas igual que pluto… que susto.

X: ¿Quién eres?

Tello: Me llamo Cristian, soy el tío de Erik

Obviamente yo a este niño nada más que lo había visto 2 veces, y una fue cuando me lo enseñaron en la foto de la ecografía.

X: Ah vale, yo soy Mª Dolores, encantada, soy la profesora…

Tello: Vamonos precioso…

Erik: No te conozco…

Tello: ¿Cómo que no? Soy tu tito. –De nuevo volví a poner esa voz muy rara, que susto.

Mª Dolores: No puedo darte al niño, si no te conoce lo siento.

La profesora guapa, me estaba intentando quitar al hijo de mi compañero de trabajo que lo había dos veces en mi vida, no al compañero si no, al niño.

Tello: Que no, que soy su tito…

Erik: Mentira.

Mª Dolores: ¿Quiñen es usted?

Tello: Me he presentado hace un minuto..

Erik: No te conozco…

Tello: Si me conoces.

Erik: No.

Tello: Sí

Mª Dolores: ¿Estas discutiendo con un niño de 3 años? ¿O es mi imaginacion?

Tello: No lo se, todo es muy raro, yo solo estrellle mi coche, me mordio un perrro, me tiraron los tejos, y ahora estoy aquí lleno de niños endemoniados, pintando paredes, y meandose encima.

Erik: Yo no me meo encima, soy mayor.

Tello: Oh si, claro, ¿Tienes el carnet de conducir ya?

Erik: Yo tengo un coche… ¡De los bomberos!

Y de pronto apareció Alexis, maldito sea.

Alexis: Hola precioso –Dijo abrazándolo.

Nota mental, no tener niños.

Mª Dolores: ¡Es usted el padre?

Tello: ¿No me jodas? Como si no notase.

Erik: ¡Malo!

Tello: Huy lo que me ha dicho el niño, del retaco este.

La chica se rió, y yo me reí.

Erik: Mala gente.

Alexis: ¿Qué tal se  ha portado?

Mª Dolores: Muy bien, no ha habido ningún problema, mañana a las 9 ¿Vale?, Hasta luego.

Tello: ¡ADIOS! ¡HASTA MAÑANA!

Erik: No mañana…

Alexis: Tranquilo, no va a venir mas..

Tello: ¿Por qué? Si yo quiero mucho a mi Raúl, ¿A que si precioso?

Alexis: Se llama Erik.

Tello: Joder, le podías haber llamado Paco o Juan, que se están perdiendo esos nombres..

Después de llevarme a casa, y con cara de pocos amigos, me propuse algo, Erik y yo íbamos a ser buenos amigos.

Capitulo 70

Casi dos años después...

16 de Octubre de 2014.

Irene: Me tengo que ir a comprar, cuidalo bien y Erik comportate.
Erik: Hola mama.
Andrea: No es hola, es adiós, porque se va.
Irene: Dame un besito.
Erik: mua mua. -Se acercaba a ella.
Irene: Ten cuidado que ultimamente esta muy nervioso.
Erik: Cuidado...
Irene: Te quiero eh.
Erik: Papá.
Andrea: Está trabajando, luego viene a verte.
Irene: ¡Adiós! -Salió por la puerta y se fue a comprar

Andrea era la canguro que le habían puesto a Erik, ya que Irene encontró trabajo y no podia cuidar de él, Alexis en nada vendría.

Andrea: ¿Quieres ver los dibujos?
Erik: pelota
Andrea: Este Alexis... -Sacó el CD de todos lo capitulos de Oliver y Benji.
Erik: ¡PAPA!
De pronto Andrea se giró y vio a Alexis con una pelota.
Alexis: ¡ERIK!
Andrea: Lo que faltaba ya...
Alexis: ¿Estas viendo Oliver Y Benji?
Erik: Mamá.
Alexis: No, soy papá..
Erik: Caca.
Andrea: Ven que te cambio de pantalones..
Alexis: Te he traído una pelota para que juegues.
Erik: Bien, papa. Adiós. -Le despedia con la mano, porque Andrea se lo llevaba para bañarlo.
Andrea: ¿Quieres bañarlo tu?
Erik: caca
Andrea: ¿Otra vez?
De pronto el pantalon apareció una mancha de pipi.
Alexis: Erik, eso es pipi, no caca.
Erik: ¡Tele! ¡PELOTA! ¡MAMA! -Empezó a llorar.
Alexis le cogió y lo llevó hasta el cuarto y allí lleno la bañera y le echo el champú para que salieran la espuma.
Alexis: Venga quitate la ropa, ¿Sabes como es no?
Erik: ¿duchate conmigo? Mamá lo hace.
Alexis: Pero tu mama esta trabajando...
Erik: Pues no lavo.
Alexis: Si...
Erik: ¡ANDREA! ¡ANDREA! ¡ANDREA!
De pronto apareció Andrea por la puerta.
Andrea: ¿Que te pasa Erik?
Erik: No ducha papa
Andrea: ¿Qué has dicho?
Erik: ¡NO DUCHA PAPA! -Empezó a enfadarse.
Alexis: Si yo ya me he duchado.
Erik: Mas limpio.
Andrea: Yo me tengo que ir ya, a las 5 vuelvo.¡Adiós Erik! Dame un besito.
Erik se apoyo en la bañera y ler dió un beso a Andrea, y después le despidió con la mano.
Erik se puso al lado de Alexis.
Erik: Una cosa al oído papi.
Alexis se agachó.
Erik: Tengo hambre...
Alexis: Venga a la ducha y a comer, que ya mismo viene mami.
Erik: Ropa
Alexis: Levanta los brazos -Erik hizo lo que su padre le dijo.
De pronto sonó la puerta, suponía que seria Irene.
Erik: ¿Mama?
Alexis: Si.
Erik: ¡MAMA!
Alexis: No a la ducha y ahora vas a con mamá donde quieras.
Erik obedecio y se quito la ropa, Alexis comprobo como Erik se había echo pipi.
Asi que le duchó y cuando paso un ratillo apareció Irene.
Irene: ¿Donde esta mi niño?
Alexis: Aqui estoy :D
Irene: Tú no, mi niño. -Se acercó a Erik y le dio dos besos.
Erik: Ducha conmmigo.
Irene: Mañana, que ahora hay que comer ¿Tienes hambre?
Erik: Si, quiero comer.
Alexis: Y yo, ¿le secas tu? Mientras voy poniendo la mesa.
Eril: ¡Vaso de micky!
Irene le seco y le puso el pijama, porque esta tarde lo mas seguro es que quisiera echarse una siesta. Y después lo llevarían a dar una vuelta por el parque y que jugará con Alexis.
Cuando terminaron de comer, que por cierto lo puso todo sucio con los espaguettis, así de nuevo tuvieron que cambiarle el pijama, porque se lo había manchado, despues de cambiarselo, Irene se fue a dormir la siesta con él mientras que Alexis se fue a comprar unos pantalones que le hacía falta y cuando llego sobre las 8 o así, estaban todavía durmiendo.

Capitulo 69, y último.

Capitulo 69.

Llegaron a las ocho y media al lugar donde celebrarían la boda, estaban todos los invitados allí, la música sonaba y había buen rollo en el ambiente.

Había muchos periodistas en la puerta así que Alexis habló con ellos un rato mientras yo escuchaba atentamente a sus explicaciones y respuestas.

A las nueve entramos donde estaba todos ya sentados en sus mesas, y fuimos pasando una por una para saludar.

El fotógrafo pasaba por las mesas y echaba muchas fotos, aparte de pedir algún que otro autógrafo.

Ya pasado un rato empezaron a servir la cena, bien buena por cierto, aunque los novios apenas probaran nada, muchos nervios y eso conlleva a pérdida del apetito.

Se sonreían, se daban la mano, abrazos y besos. El día perfecto para los dos, tantos momentos malos quedaron atrás y se cerró una etapa.

Después de cenar sobre las doce o así salió la inmensa tarta que habían pedido.

Mónica: Cortarla los dos, ¿No?

Irene: Venga, dame la espada esa.

Alexis: Antes de que cojas la espada esa que sepas que te quiero, por si se te cruzan los cables y acabamos todos degollados.

Irene: Que gilipichis eres, venga coge.

Alexis: Ay mamá, que te quiero eh.

Martina:Que exagerado.

Piqué: Pasamela que le iguale las puntas a Puyi.

Puyol: Eh, mi pelo lo dejas quieto.

Piqué: Se da por aludido..

Cesc: Es que has dicho “Puyi”.

Piqué: ¿Qué estas de su parte?

Ibi: Peleas no eh.

Y los tres a la vez mandaron callar a Ibi.

Después del cachondeo de la espada, cortaron la tarta.

Alexis: Tengo que decirte una cosa. –Alexis estaba un tanto raro, y con las manos detrás de la espalda.

Irene: ¿Dónde vamos?

Alexis: Ahí, que es importante.

Irene: No me asustes.

Alexis: Irene creo que tienes…

Saco la mano y le lleno de nata por toda la cara. No mucha pero se notaba..

Irene: Serás capullo, ¡EL DIVORCIO! –Dijo mientras se reía.

Alexis: Ay que me meo…

Irene: Tonto, el maquillaje.

Alexis: Toma –Le dio una servilleta.

Irene se limpió.

Alexis: Te quiero mucho.

Se abrazó a ella.

Irene: Sí, si te quiero pero me has llenado de nata.

Alexis: No me podía resistir.

Irene: Gracioso eres cojones.

Alexis: Todavía te queda por aquí. –Se señaló la parte de la boca.

Irene: Ahora es cuando tu me lo tienes que quitar con la mano –Soltó una carcajada malvada.

Alexis: ¿Con la mano?

Se acercó a ella y le besó, haciendo que no quedará ni rastro de la nata.

Alexis: MMM, me gusta la tarta, vamos a comer un trozo. –Le agarró de la mano y la llevo hasta donde estaban todos.

Y allí comieron un trozo, y siguieron hablando con los invitados, riéndose de las tonterías de Piqué y compañía y lo mejor de todo disfrutando del día tan bonito que les quedaba aún por delante.

Irene: Alexis el vuelo lo tenemos en 2 horas, y sabes que hay que irse  antes para facturar y eso.

Alexis: Vale, si son las 4 de todas formas estoy ya cansado.

Irene: Sí y yo.

Comunicaron a todos los invitados que tenían que marcharse para el viaje, así que se despidieron y el chófer que tenían les llevo hasta la casa y allí ya se irían hasta el aeropuerto.

[En casa]

Irene: Ayúdame a quitarme el vestido, porque vamos, manda tarea.

Alexis: ¿Me vacilas? –Le miró de arriba abajo.

Irene: No, y no pienso ir así así que venga.

Alexis Bueno haber…

Estuvieron un rato tirando del vestido para ver si salía. Y al décimo intento salió.

Irene: Gracias. –Se puso los pantalones y la camiseta.

Alexis: Coño, ¿Y esa ropa interior?

Irene: -Se avergonzó- Tus hermanas…

Alexis: Estas mujeres…

Irene: Que vergüenza por dios.

Alexis: Pues estás muy guapa así eh.

Irene: Grr…

Alexis: No, eh. A mi ahora no me digas nada de eso.

Irene: Oye pedazo tonto, que era coña eh,

Alexis: Que mal empezamos este matrimonio.

Irene: Me apuesto lo que quieras que nos lo pasaremos muy bien. –Le guiñó el ojo y cerró la maleta.

En cuanto terminaron de recoger la ropa cogieron un taxi, el cual les llevaría hasta el aeropuerto, y casi una hora de espera hasta que saliera el avión, para las Islas Seychelles.

Y lo mejor de todo es que tenían casi 2 horas de vuelo, y resulta que el horario era cuatro horas más. Así que llegarían sobre las nueve de la mañana.

Irene mientras que estaban en el viaje, se quedo dormía, lo que aprovecho Alexis para hablar con su familia, para ver como se lo estaban pasando.

Y como bien programaron llegaron a las nueve y media a Seychelles donde vieron al guía que les llevaría donde ellos quisieran.

Ya a las diez llegaron al hotel, donde tenían una suite, para toda la semana que tenían de luna de miel.

[Ya en la habitación]

Irene: Tiene jacussi en la terraza. ¿Podemos estrenarlo no?

Alexis: Claro, venga ponte el biquini.

Se fue corriendo para el servicio y en nada salió con el biquini y un par de toallas.

Alexis en el tiempo que Irene había estado poniéndose el biquini se puso el su bañador uno azul turquesa.

Irene, le agarró de la mano y lo llevo hasta el jacussi, donde le dio a funcionar y empezaron a salir burbujas.

Irene: Yo primera.

Alexis: Adelante señorita.

Irene: Tsé Señora, señora Sanchez jojo.

Alexis: Cierto, que se caso usted conmigo hace unas horas ¿Verdad?

Irene: Sí.

Irene se metió en el jacussi y Alexis, a continuación.

Está se acercó a él y le beso.

Irene: Haré que todos los años que estemos juntos, no te aburrirás ni te arrepentirás de haberme elegido.

Alexis: No es haberte elegido, es que no me diste opción, al aparecer en ese ascensor coger y meterme la mano hasta el corazón y sacarlo. No es normal, no son 5 segundos. Y ya lo tenías todo de mí.

Eso que había dicho Alexis le había puesto los pelos de punta a Irene.

Irene: ¿Sabes que?

Alexis: Dime.

Irene se acercó a él y se lo dijo al oído.

Alexis: ¿En serio?

Irene: Sí, lo he soñado, y créeme, lo será.

Alexis: Ojala aunque una niña también será bonito.

Irene: Sí, pero como ya te he dicho, será un niño. Lo soñé mientras veníamos hacía aquí, ¿Y sabes que otra soñé?

Alexis: Sorpréndeme.

Irene: Soñé que no podía vivir sin ti, nada más lejos de la realidad.

Alexis: Ya no duermes más eh.

Irene: Al menos está noche no creo…

Alexis: Ya nos estamos desviando del tema.

Irene: Dime que me quieres, dime que nunca más me vas a engañar, dime que soy lo que más quieres y dime que nunca te va a pasar nada. Dímelo.

Alexis: Te digo que mientras este vivo, no te pasará nada y no volveré a cometer el mismo error, es que no sería capaz.

Irene: ¿Sabes que es lo que pienso sobre el pasado?

Alexis: Dime

Irene: Si quieres saber el resultado del pasado, mira el presente que realmente ese es el resultado.

To be continued…

Capitulo 68.

[Alexis]

Los segundos se convertían en minutos, horas e incluso días. No se como apenas 3 metros de distancia tardaban tanto en llegar. La quiero tener a mi lado, decirle que está preciosa, que me encanta su sonrisa, simplemente me encanta ella, la quiero. Sabía perfectamente que ahora mismo tendría una cara de pardillo, lo sabía, pero no me importaba, quería decirle que la quería. Y hoy más que nunca.
Cada paso que daba lo miraba milimetricamente, un par de pasos más y por fín. Dos, uno...

Le sonreí.
Irene: Que nervios.... -Me dijo sonriendo.
Alexis: Estás preciosa..
Irene: Gracias, tu tambiñen estas precioso.
¿En serio no podía besarla ahora? ¡EN SERIO!
Sentía como 600 ojos nos miraban.
Que nervios, por fin llegó el ansiado día.

El sacerdote empezó la boda.

Sacerdote: Acerca de la libertad para contraer matrimonio...
Irene&Alexis: Sí, venimos libremente.
Sacerdote: Acerca del amor mutuo durante toda la vida.
Irene&Alexis: Si, estamos dispuestos.
Sacerdote: Acerca de los hijos: Don de Dios, y su educación Cristiana.
Irene&Alexis: Si, estamos dispuestos.

Sacerdote: Acerca de vuestro consentimiento...
Alexis: Yo Alexis, te acepto a ti Irene, como mi esposa y prometo serte fiel en lo próspero y en lo adverso, en la salud y en la enfermedad y amarte y respetarte todos los días de mi vida.
Irene: Yo Irene, te acepto a ti, Alexis, como mi espoco y prometo serte fiel en lo próspero y en lo adverso, en la salud y en la enfermedad y amarte y respetarte todos los días de mi vida.

Sacerdote: ¿Los anillos?
Alexis: Aquí están.
Sacerdote: Comience.
Alexis: Irene recibe este anillo como signo de mi amor y de mi fidelidad. -Le agarré de la mano, la tenía muy suave, cogí el anillo y se lo coloque cuidadosamente. Después le miré y le sonreí.
Irene: Alexis recibe este anillocomo signo de mi amor y de mi fidelidad. - Me ofreció la mano y le coloque el anillo, despacio, quería recordar este momento eternamente.
Sacerdote: Por el poder que me otoega la Santa Iglesia, yo os declaro marido y mujer. Puedes besar a la novia.
Me acerqué a ella y volteé la cabeza levemente, y me acerque hacía ella, y juntamos nuestros labios, una vez más. Pero sin duda está era la mejor junto al primer beso. Ahora estabamos casados.
Todo el mundo aplaudía, mi madre me abrazaba. Me separaban de ella, sólo quería decirle que la quería a morir.
Alexis: Un momento.. -Deje a mi madre con alguien y me dirigí a Irene.
Irene: ¡Alexis! -Me sonrió y se echo en mis brazos.
Alexis: Te quiero Irene, te quiero mucho.
Irene Y yo a ti, cariño.
Cesc: ¡Enhorabuena! -Se acercó y nos abrazo.
Nuria: Que bonita vas. Felicidades, espero que seaís muy felices.
Fotografo: ¿Os podeis poner para una foto?
Todos los colocamos y estuvo echando fotos, nos saludamos con todos.
Zayn: Que guapos, que clase.
Irene: ¡Zayn! -Le abrazó.
Zayn: Felicidades Irene, espero que seas feliz con él, ya que conmigo no pudo ser. -Me besó en el pelo.
La verdad es que sentí tristeza, pero cuando ví a Bibiana, me embrago un alegría inmesa cada uno eramos felices, pero con diferentes personas.
Liam: Dios, que guapa, en serio. Foto foto. -Le dió el móvil a Niall, y nos hizo a todos unas fotos.
Alexis: Gracias a todos por venir en serio.
Niall: No es nada, ya sabes. Estamos aqui para todo.
Rocío: ¡IRENE! - Me abrazó.
Irene: Que nerviosa estoy tía.
Javi: ¡Que guapa!
Irene: Gracias, aunque tu novia me quería quitar mis minutos de glorias.
Rocío: Oish no digas tonterias en serio.
Alexis: ¡Ibi! Acercate..
Ibi: ¡Felicidades ante todo! Y estaís muy guapos, Irene más, tu te mantienes jajaja
Irene: Gracias.
Ibi: Me alegro por vosotros, espero que os deís cuenta de todo lo que os quereís.
Irene: Si.
Ibi: Venga animaos, que ahora os van a echar más fotos, hay muchisimas fans...
Irene: Que vergüenza.
Alexis: Pues vamos, que ya es hora -Rió.
Agarrados de la manos salimos hacía fuera de la iglesia donde estaba muchisimas personas, conforme salimos un oleada de arroz cayo sobre nosotros.
Cesc: Hostia, dadme un puñado y mañana os invito a una paella. -Decía entre risas.
Piqué: Toma -Le echo todo una bolsa encima.
Nuria: ¡Bestia! - Se rió.
Cesc: Estoy para que me coman jojojo.
Nuria empezó a reirse, este chico tenía unas cosas.
Irene: Parad ya!
El arroz paró de caer y todo se convirtió en un ir y venir de Flashes.
Alexis se acercó y firmó algunos autografos y después nos montamos en el coche que nos llevaba para el jardín de un salón de bodas donde se celebraria.

Capitulo 67. Boda I

Irene.

Llego el día, 18 de Julio. Hoy en 7 horas me casaría…

Tenía millones de sentimientos, quería llorar, quería reír, quería sonreír, quería gritar, pero estaban todos durmiendo. Llevaba sin ver a Alexis 2 días. Puta mierda.

De pronto se abrió la puerta de mi habitación.

Mónica: Cielo, vamos a desayunar que están aquí todas…

Irene: ¿Todas?

Mónica: Tamara, Marjorie, yo y Martina, aparte de tus amigas.

Irene: Vale, bajo en nada.

Cerró la puerta y yo me levante, y respire profundo.

Cuando llegué estaban todas alrededor de la mesa, sonrientes y felices.

Fui saludando a una por una.

Nuria: Hoy por fin.

Miriam: Tienes a muchísimas chicas abajo ¿Sabes?

Irene: Que el famoso es él no yo. –Reí con resignación.

Bibiana: Da igual, a disfrutar del momento, que esto sólo se vive una vez.

Tamara: ¿Cuándo vais a saber que es?

Irene: Conforme que volvamos de la luna de miel, tengo cita con el ginecólogo, y ya nos lo dice.

Martina: Que ganas de ver a mi niño.

Irene: Pues anda que yo, dos días.

Marjorie: Ah, me ha dado un mensaje para ti.

Irene: ¿Si? –Dije ilusionada.

Marjorie: Dice que te quiere mucho, y que te echa de menos.

Irene: Joder, quiero verlo.

Rocío: En unas horitas…

Irene: Ya, pero es que ¡QUIERO VERLO!

Tamara: Se nota que le quieres…

Irene: Mucho, más que a mi vida. Oj que pastelosa estoy.

Mónica: Los nervios cariño, los nervios…

Estuvimos desayunando durante un par de horas, la verdad es que por un momento deje de un lado esos nervios. Marjorie me ayudo mucho a dejar la mente en blanco.

Alexis se había quedado a dormir en el piso, mientras que yo me quede en la nueva casa.

Desde temprano ya había alguna que otra chica en la puerta, la verdad es que no entiendo del porque están ahí pero el mundo es muy difícil de comprender.

A las doce, me tuve que duchar ya que en 20 minutos llegaba el peluquero.

Ayude a mi madre a vestirse, y a casi todas, mi vestido estaba colgado en la ventana. Lo miraba, con ojos de melancolía, tantos sufrimientos tocaron fin.

Cuando me quise dar cuenta, habían pasado ya 20 minutos, me quede embobada viendo el vestido y pensando.

El chico que llegó, era el peluquero así que estuve al lado de ellos para darle lo que necesitase al hacerle los peinados a Mónica, Marjorie, Martina y Tamara. La ultima era yo.

Ya eran las una, y me tocaba a mí. Dos horas, 120 minutos para casarme. El reloj de mi cabeza estaba “Tic, tac, tic, tac” estaban todos a mi alrededor diciéndome que tenía que hacer, pero yo sólo escuchaba el “Tic,tac, tic,tac” estaba tranquila, no quería que ningún comentario de ellas llegará a cambiarme de idea o quizás otra cosa.

Últimamente al haberme descuidado un poco el pelo, me había crecido bastante, en casi 3 meses no me hice nada de plancha ni cosas por el estilo. Estaba el pelo sano, y ahora se notaba más.

El chico dejaba caer rizos perfectos por mi hombro, ya les advertí que no quería nada extravagante, así que elegimos un peinado sencillo, las puntas rizadas al igual que el flequillo para el lado con rizo en el final del mechón.

Me comentaron que podía ponerme un tinte para tener el pelo más claro, pero es que se veía que no se habían enterado de que no quiero tener otro look, quiero ser yo misma.

Sonreí cuando escuche que se había acabado la laca, lógico y normal, después de 4 peinados, lo raro era que no se le hubiera acabado antes.

Media hora después terminaron de peinarme, el peinado quedaba muy bonito, y sencillo.

Nada más descansar un poco llego la maquilladora. Dios, que estrés. Me asome un rato por la ventana, había ya muchas chicas y pancartas con el nombre de Alexis.

Creo que estás chicas no saben que él no está aquí porque si no, no lo entiendo.

Ví como llegaron algunas de las chicas estas estaban ya vestidas, por cierto preciosos los vestidos.

No tardaron nada en venir a buscarme, vi aparecer a Bibiana.

Estaba realmente guapísima, el estar con Zayn le había echo cambiar de pies a  cabeza.

Llevaba esto:

Por otro lado apareció Rocío, con su sonrisa habitual y ahora más, estaba feliz. Muy feliz.

El vestido era chulísimo, sabían vestir.

Llevaba esto:

Pero entro Marjorie por la puerta.

Marjorie llevaba esto: 

Y Tamara este:

Martina se decanto por un precioso vestido: 

Y mi madre por este otro:

Marjorie: Irene, vamos que tienes que maquillarte, te queda un poco más de una hora.

Irene: Ahora hablamos chicas. –Me acerque a ellas y le di un par de besos.

Me fui para mi habitación allí estaba todo hoy.

El tiempo pasaba rapidísimo apenas en 15 minutos estaba maquillada, y eran ya las dos y diez. Me quedaban 50 minutos de soltera.

Aunque la verdad es que estaba deseando de verle para decirle te quiero.

Irene: Pues nada.

Martina: A vestirse cielo…

Todos salieron de la habitación, al menos las que no pintaban allí nada.

Martina: Algo azul, algo nuevo y viejo.

Irene: SI.

Bibiana: Tía, ¿y esa ropa interior? Que sexy.

Irene: Me la ha comprado Marjorie y Tamara.

Rocío: Esta noche te la quita grr...

Irene se echo a reír.

Bibiana: Si si ríete, verás luego…

Me fui al servicio donde puse la ropa interior, la verdad es que era muy provocativa.

Salí para fuera donde me pusieron el ligero y lo demás.

Y después de espolvorizarme perfume por todo el cuerpo, fueron a por el ansiado vestido.

Entro como un guante, perfecto. Este era el vestido: 

Regresaron de nuevo la maquilladora y el peluquero para retocarme, y cuando me di cuenta. Era la hora, llego el momento.

 Baje las escaleras tranquila sin prisa, fotos y más fotos.

Cuando mire para la calle, veía a muchas chicas gritando, así que salude y sonreí y me metí en el coche, el cual me llevaría para la iglesia.

 Cuando llegué a la iglesia y me asome para ver cuanta gente había me maree un poco.  300 personas, no es para menos.

Mi padre me agarro del brazo y salimos hacía fuera.

La música sonaba, todo el mundo me miraba yo sonreía y le dirigía la mirada Alexis, mi querido Alexis. Por fin, es la hora.

Él estaba precioso, su sonrisa su pelo, y esa mirada…

Continuará.